lunes, 22 de abril de 2013

Acto XXVII.- Vestidos y más vestidos


Al llegar al hotel, Minho ya le estaba esperando en el lobby.

“No estaba seguro si vendrías el día de hoy,” dijo el hombre con una no muy común sonrisa vulnerable.

“¿Y por qué razón no?” Taemin sonrió seductivamente.

“Porque tu amigo de Corea se iba hoy. Pensé que tal vez te querrías ir con él.” Respondió Minho.

“No seas tonto. Te tengo a ti.” Taemin lo besó en los labios.

El cuerpo de Minho se tensó por un momento, luego gentilmente retiró a Taemin.

Taemin no esperaba esa reacción. Hasta el momento, era Minho el que iniciaba los besos. Estaba seguro que había una razón más profunda para ello. No pudo evitar sentirse amargado. ¿A caso su actuación le había desagradado a Minho?

“¿Estamos haciendo la A el día de hoy o la B?” preguntó después de calmarse.

La rutina A era la que llamaba la más inmediata atención, simplemente pasar el día en el hotel después de comer.

 La rutina B involucraba salir y actuar después de comer. La B tenía la ventaja de ponerlos a la vista en frente de multitudes de personas.

“Ninguna de las dos,” dijo Minho. “Iremos de regreso a mi apartamento. Jonghyun estará ahí también, así que no estaré propenso a perder el control.”

Taemin asintió, sorprendido. El día de hoy sería raro estar con
Minho, los dos solos. Si Jonghyun iba a estar ahí sería una excelente distracción.

Jonghyun salió a recibirlos en cuanto entraron al apartamento. “Hola May, la heroína ha aparecido.”

“H-Hola.” Taemin estaba sorprendido por cuan celoso se sentía de que Jonghyun hubiera seguido visitando el apartamento de Minho cuando fuera que le diera la gana, mientras Taemin no estaba.

“Vamos, pasa adelante,” le indicó Jonghyun como que si en realidad fuera su casa.

La cena había sido preparada en la mesa del comedor.

“Primero, por el éxito del plan.” Jonghyun se encontraba de extremadamente buen humor. “May, escúchame. En una semana, habrá una gran fiesta por el matrimonio en la casa en Dorsett.

Originalmente, íbamos a tener la fiesta en el hotel de Londres, pero si los rumores salen habrían grandes problemas, así que cambiamos de opinión.”

Taemin asintió. Sabía que la fiesta de compromiso originalmente había sido planificada para el mes de mayo, así que sus planes se habían adelantado un poco.

“¿Y cuándo es la boda?” preguntó.

“Bien, ahora no entres en pánico,” le advirtió Jonghyun, “pero a la mitad de la fiesta, te irás y te cambiarás a tu vestido de novia, la fiesta de compromiso se transformará en la boda, y después de la fiesta saldrán para su luna de miel.”

Taemin tragó fuertemente de manera inconsciente, las cosas estaban sucediendo más rápido de lo que se imaginaba.

“Y luego se acabó,” Jonghyun concluyó. “Podrás volver a tu antigua vida y Minho abandonará Inglaterra hasta que la emoción muera.”

“¿Qué haré hasta que llegue la fiesta de compro—digo hasta la boda?” preguntó Taemin.

“Queremos que te quedes aquí en el apartamento hasta el día de la fiesta. No sería divertido si alguien te secuestrara.” Dijo Minho sin mostrar emoción alguna.

“¿Secuestrado?” repitió Taemin.

“Estaremos enviando las invitaciones para la fiesta el día de mañana,” explicó Minho con más detalles. “No sabemos lo que alguien podría intentar de hacer si no les gusta la idea.”

Taemin asintió suavemente con la cabeza. En 10 días el sería liberado de esta farsa. Se sintió más preocupado que emocionado.

¿Por qué podría ser?


* * * * * * * *

La vida en el apartamento no era más que sufrimiento. Cuando estaban solos juntos Minho y Taemin no se hablaban incluso cuando se topaban el uno con el otro.

 Estando solos por completo en una enorme habitación, el no hablar con nadie era aburrido, y Taemin sintió como si se fuera a volver loco.

Mientras estaba recostado en cama, sus pensamientos lo llevaban a Minho. Sabía que el hombre estaba por ahí, cerca.

Además de su gran casa en Londres, Minho tenía una finca con un ejército de sirvientes y que jamás había trabajado en su vida.

Al principio, Taemin había estado sorprendido que alguien tan bendecido por la vida existiera, sin embargo el hombre no parecía ser muy feliz.

Sus padres habían muerto sin haberle prestado atención, sus familiares querían robarle su fortuna y estaba siendo forzado a casarse.

“Me pregunto qué hará Minho después de que esta farsa termine.”

Por más que lo intento, Taemin no pudo imaginarse nada, pero sería Minho tragado nuevamente por su estilo de vida anterior.

Alguien tocó la puerta de Taemin y este saltó.

Minho abrió la puerta y se detuvo con una expresión adolorida.

“Quieren que te pruebes el vestido y hacer un test de maquillaje en la sala.” Dijo, informando a Taemin acerca de lo que necesitaba con tan pocas palabras como fuera posible.

Taemin asintió silenciosamente. Al llegar a la sala, vio un vestido de novia blanco junto con docenas de otros vestidos de varios colores esperando por él.

Cualquier mujer hubiera estado cautivada con la vista, pero Taemin se sentía oprimido ante la montaña de ropa.

 “¿Cuántos vestidos tengo que usar en total?” preguntó aterrorizado.

“Uno para la fiesta de compromiso y el vestido de bodas, así que son dos en total,” le respondió una mujer, una de las diseñadoras contratada bajo la condición de mantenerlo todo en secreto.

“Si solo necesito escoger dos vestidos, ¿por qué hay tantos?” se preguntó Taemin.

“No sabremos cual de todos es el mejor hasta que se los pruebe todos, ¿correcto?” le indicó la mujer.

“Oh.” Taemin comenzó a ver a su alrededor por una salida de escape, pero Minho había desaparecido. Fue obligado a ponerse tantos vestidos que se sentía como una muñeca.

Una vez habían escogido los vestidos, los estilistas llegaron.

Este grupo manejó su cabello sin parar y colocó maquillaje en su rostro, cuando todo terminó estaba agotado.

“¿Es acaso este un castigo por haberme quejado de estar aburrido?”

Había bastante que hacer para prepararse para la boda en 10 días y parecía ya no haber tiempo para aburrirse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario