sábado, 3 de noviembre de 2012

Acto XXI.- Celos


En el balcón se podía escuchar la música del salón.

“¿Le gustaría bailar?” preguntó el hombre. Taemin asintió.

Tomaron sus manos y comenzaron a bailar al ritmo de la música.
“¿Usted vive en este país?” preguntó el hombre

“No, soy una estudiante de intercambio de Corea,” le contestó Taemin morosamente.

“He estado un par de veces en Corea.” El hombre sonrió. Eso lo convertía en un espécimen muy raro entre todos los extranjeros que apenas sabían donde quedaba Corea en un mapa. “Y ¿qué está estudiando?”

“baile,” Taemin le informó. “¿Y usted?”

“¿Yo?” el hombre se rió incómodamente. “Yo vine a Inglaterra a observar el paisaje. Por cierto señorita, ¿cuál es su nombre?”

“May,” dijo Taemin

“May-goon” dijo el hombre.

“¿Sabe hablar coreano?” preguntó Taemin sorprendido

“Solo saludos simples,” el hombre confesó. annyeonghaseyo, annyeong, kamsahamnida.”

Taemin fue atacado por un fuerte sentimiento de nostalgia al escuchar a alguien hablar coreano por primera vez en años.

Ciertamente, había escogido excluir el coreano de su vida con tal de aprender a hablar el inglés mejor. Recordó todas las luchas que había atravesado desde que había venido a Inglaterra, y todos los recuerdos hicieron que lágrimas se acumularan en sus ojos.

 “¿Qué le sucede May-goon?” el hombre paró de bailar y observó el rostro de Taemin.

“Lo siento,” dijo Taemin, avergonzado. “Solo estaba recordando Corea.”

“¡May!” gritó Minho, que había aparecido súbitamente. Sonaba enojado. “He estado buscándote por todas partes. ¿Dónde estabas?”
“Minho…” Taemin inmediatamente limpió sus lágrimas.

Minho notó al hombre que estaba parado junto a Taemin y se detuvo con una mirada bastante sorprendida. “¡Príncipe Alexander!”

“¿Príncipe?” Taemin se le quedó viendo al joven, petrificado.

Sabía que el príncipe heredero al trono de algún país u otro iba a estar presente en la fiesta. Y por supuesto había encontrado extraño que el hombre joven fuera tan refinado y tan intrigante, pero jamás pasó por su mente que su pareja de baile fuera un príncipe.

Entonces recordó las reglas de etiqueta, las cuales prohibían a cualquier persona de menor clase iniciar una conversación con alguien de clase superior.

La razón por la que el hombre había estado tan solo en el salón no era porque los demás lo estuvieran ignorando, sino porque su status era tan alto que no le podían hablar.

Minho volteo a ver al príncipe heredero al trono. “¿Lo ha ofendido en algo mi prometida?”

“¿Eres la prometida de Lord Choi, May-goon?” el príncipe heredero al trono preguntó a Taemin, ignorando completamente a Minho.

“S-Si.” Taemin asintió vehementemente. Se sentía mal por haberle dado alas a una persona tan agradable como el príncipe heredero al trono.

“Es una pena. Si alguna vez cambias de opinión, llámame,” el príncipe le guiñó el ojo, sugiriendo que todo era una broma.

 “En serio, su majestad, debe restringirse un poco,” Minho rió, pero algo en su expresión permaneció severa.

El príncipe sonrió agraciadamente “Lo siento. Aunque solo deja que te de un consejo. No deberías dejar a una prometida tan espectacular fuera de tu vista.”

“Recordaré eso,” respondió Minho con un tono oscuro, “¡D-Disculpe!” Taemin llamó al príncipe cuando este estaba a punto de ingresar al salón.

Su cara se volvió completamente roja. “Me disculpo por no saber quién era usted.”

El príncipe hizo una reverencia. “Y yo me disculpo por no haberme dado cuenta que usted era la prometida de Lord Choi.”

Taemin le insinuó que no era necesario disculparse sacudiendo su cabeza ferozmente.

“¿En verdad era el príncipe heredero al trono?” Taemin murmuró después que el hombre se había retirado.

Minho lucía extremadamente furioso “¿Te fuiste con él sin siquiera saber eso?”

“Bueno, se miraba como una persona común y corriente,” dijo Taemin.

“Además estaba aburrido.”

El rostro de Minho parecía aun más molesto cada vez que veía a Taemin. “¿A caso sigues a cualquiera que te invité cuando te sientes aburrido?”

“¡Minho!” Taemin estaba sorprendido por el enojo del hombre, el cual estaba viendo por primera vez. Trató de defenderse a sí mismo.

“Me prestó su saco y bailamos juntos.”

¿A caso había hecho algo tan increíblemente malo? Se sentía inseguro, no comprendía la razón del porque Minho estaba tan molesto.

“Regresaré el sacó de su majestad,” dijo Minho violentamente arrebatando el saco de los hombros de Taemin.

Taemin estornudó en cuanto el frio de la noche tocó su piel.
Minho se quitó su propio saco y lo colocó alrededor de los hombros de Taemin. Pero ese fue el único signo de bondad que mostró.

* * * * * * * *
En el camino de regreso a casa, Minho aun parecía bastante molesto y permaneció en completo silencio todo el camino.

Taemin comenzaba a sentirse irritado también. Como fuera que viera la situación, no podía imaginarse que había hecho mal.

Todo era culpa de Minho. Sulli había ensuciado su vestido así que no podía bailar frente a los demás y Minho no había estado ahí para supervisarlo durante la fiesta. Y había sido Minho el que lo había abandonado en primer lugar.

Luego una idea le cruzó por la mente “No estará enojado porque fui a la fiesta con Jonghyun después de que él me dejo en casa, ¿verdad?

Pensándolo con más calma, se percató que Sulli sería sin duda alguna la prometida perfecta.

Tal vez Minho también se había percatado de ello y había cambiado de opinión con respecto al plan. Si ese era el caso Taemin únicamente estaba estorbando.

Taemin no sabía dónde se encontraba parado ni como debería actuar.

Mientras Taemin se encontraba sumergido en sus pensamientos, el auto llegó al apartamento de Minho. Los dos ingresaron silenciosamente en el elevador y se fueron a sus respectivas habitaciones sin decir una sola palabra.

Mientras Taemin se quitaba el vestido, sintió una duda que lo molestaba.

¿Qué he estado haciendo aquí?

Por supuesto, todo esto había comenzado porque necesitaba el dinero. Pero se la había pasado sufriendo por estarse vistiendo de mujer y clases de vals, ambas cosas que odiaba profundamente, mientras se decía a si mismo que todo esto lo había hecho por el bienestar de Minho.

De lo contrario jamás hubiera tomado parte en este plan casi criminal. Había logrado llegar tan lejos porque creía que sin duda alguna estaba ayudando a Minho.

Y ahora todo su esfuerzo era en vano.

“Si va a cancelar el contrato, desearía que se apurara y lo hiciera,” pensó.

Más dinero del que él se podía imaginar había sido atado a este plan desde el principio. Y si iba a ser cancelado, ya no tendría motivos para vivir en este apartamento.

Su vida aquí había sido más cómoda de lo que había esperado, pero no podía dejar que Minho lo siguiera consintiendo durante más tiempo.

Después de que termino de vestirse, juntó su coraje y fue a la habitación de Minho.

1 comentario:

  1. Ohh Dios en verdad que se armo un drama en un momento... Vamos a ver que pasa luego de que hablen....

    jejej por otro lado, Taemin tiene demasiada suerte, mira que bailar con un principe ^^

    ResponderEliminar