sábado, 3 de noviembre de 2012

Acto XIX.- La intervención de Sulli


Al comenzar marzo, el día de la fiesta llegó.

Minho se paseaba por la habitación nerviosamente mientras esperaba que Taemin se alistara.

“¿Podrías calmarte, Minho?” Jonghyun le dijo cortantemente.

“¿Calmarme? Te refieres a ¿qué no estoy calmado?” su amigo le respondió, su rostro enfurecido, parecía estar molesto.

Jonghyun encogió los hombros. “Solo te dejaré estar.”

El castaño tomó asiento en una silla de bastante mal humor.
Jonghyun jamás había visto que su amigo se irritara hasta por las cosas más pequeñas.

 Aun cuando el subterráneo había sido bombardeado por terroristas tres años atrás, no estado tan afectado. Y ahora estaba completamente estresado por una fiesta… debe estar en extremo preocupado por Taemin.

Minho había cambiado últimamente. Primero bebía mucho menos. Hasta ahora su aburrimiento era ahogado en alcohol todos los días. Y nunca antes había mostrado preocupación por nadie, y se preocupaba por Taemin tanto como lo hacía por sí mismo.

Tal vez sea algo bueno.

Jonghyun nunca había aceptado la idea de todo corazón, sin embargo, desde que había habido cambios y no gracias a él sino a la aparición de un joven asiático.

“May ciertamente se está tomando su tiempo para arreglarse. Me pregunto si todo estará bien.” Dijo expresando las preocupaciones de
Minho.

Sentía entender perfectamente la mentalidad de Minho. Habían pasado el suficiente tiempo juntos como para ello. Pero sin duda alguna no tenía el poder para cambiar a su amigo.

“No hay lugar para errores esta vez,” finalmente dijo Minho mientras sonreía.

La realeza extranjera asistiría a la fiesta. Si Taemin fuera descubierto, el escándalo no estaría limitado a Inglaterra.

Al fin la puerta se abrió y Taemin apareció, las preparaciones estaban completas.

Jonghyun dejó escapar un suspiro.

Taemin vestía un traje formal, blanco, tipo chino. Bordados dorados decoraban la seda. Minho lo había mandado a hacer a la medida con uno de los mejores diseñadores y no había puesto límite de precio.

Encajaba perfectamente en la figura delgada de Taemin haciendo imposible de creer que de hecho era un hombre.

 Su cabello castaño claro estaba recogido revelando una vista coqueta de su nuca. Tal vez el maquillaje añadía ese efecto. Pero no había duda alguna que una hermosa mujer llena de misticismo asiático estaba parada frente a ellos.

Jonghyun susurró, “May, pareces una nueva persona.”

Taemin sonrió animadamente, “Buenas noches, Sr. Kim.”

“Oh, no” dijo Jonghyun, rechazando su nombre, “por favor no me trates tan formal.”

Minho tomo una de las manos de Taemin, la cual estaba cubierta por un largo guante de encaje blanco, y besó la parte de atrás del mismo.

“Taemin, eres verdaderamente hermoso,” dijo Minho apasionadamente, no había rastros de su anterior impaciencia.

La pasión en su voz implicaba que, si Jonghyun no hubiera estado presente, hubiera tomado a Taemin entre sus brazos y lo hubiera besado.

“Gracias,” Taemin bajo la mirada, mientras sus mejías se llenaron de un color carmesí.

Con que May está también interesado, ¿eh?” Jonghyun dejó salir un leve suspiro, sobrecogido por el sentimiento de que había sido abandonado. Aun así, era bastante incomodo.

Hasta ahora, siempre había estado al lado de Minho, sin importar las miradas mezquinas que habían recibido de quienes los veían juntos.

El mismo Minho lo había querido ahí, pero ahora no era más que un intruso.

En esos momentos sonó el timbre.

“Yo lo atenderé. Probablemente sea su chofer.” Jonghyun incapaz de quedarse en la habitación otro momento más, se dirigió a la puerta.

Pero se quedó sin palabras ante el visitante en la puerta. En lugar del chofer se encontraba una mujer con cabellera cobriza con una apariencia similar a Minho—era su prima Sulli.

“¿Se encuentra Minho?” sonrió la mujer de manera seductiva.

“¿Te conozco de algún lugar?”

“Si, en el funeral del ya difunto Lord Choi” contestó.

 “Te recuerdo. Tu eres el amigo del colegio de Minho,” dijo la mujer.
“Me halaga que me recuerde.” La esquina de la boca de Jonghyun dibujó una sonrisa.

En adición a su brillante y cobriza cabellera, había sido bendecida con un magnifico rostro, labios rojos seductivos y ojos marrones. La mujer frente a él era sin duda alguna una verdadera belleza.

 Pero era peligroso juzgar a esta mujer solo por su apariencia. “Se un cielo y llama a Minho por mí, ¿sí?” ordeno la mujer.

“Lo siento, pero no estoy seguro de que quiera verte,” dijo Jonghyun.

“¡Bueno!” los ojos marrones de Sulli vieron con intensidad a Jonghyun.

Empujó a Jonghyun y entró a la sala de estar gritando el nombre de su primo. “¡Minho!”

“¿Sulli?” Minho, estaba saliendo al corredor junto con Taemin.

 Sulli parecía sorprendida ante la aparición de su primo.

“¿No actúes como un idiota?” Sulli reaccionó.

“Es solo que no tenía idea de que vendrías prima,” dijo Minho.

“Bueno, he estado esperando bastante tiempo por tu invitación,” dijo Sulli.

Minho levantó una ceja y dijo “¿Oh?”

“Pero finalmente me cansé de esperar y vine aquí por mi cuenta.

Bueno será mejor que nos vayamos.” Ordenó Sulli.

“¿Ir, a dónde?” preguntó Minho.

Era completamente natural que Minho estuviera confundido ante la insistencia de su prima.

“A la fiesta de esta noche, por supuesto,” dijo Sulli.

 “Desafortunadamente, ya tengo una pareja,” dijo Minho,

Sulli lo interrumpió inmediatamente, “Ese no es mi problema.” Parecía pensar que el universo giraba en torno a ella.

“Me temo que no te puedo llevar a la fiesta,” dijo Minho.

“¿A sí que planeas avergonzarme?” gritó Sulli,

“¿Avergonzarte…?” preguntó Minho.

Jonghyun no se imaginaba que Sulli tuviera sentimientos tan delicados.

“De todas formas, Minho es hora de irnos.” Jonghyun le dijo a su amigo. Era solo una pérdida de tiempo quedarse aquí a discutir.

“Mi padre nos está esperando. Vamos.” Dijo Sulli tomando la mano de Minho y comenzó a halar de él.

“¡Sulli!” protestó Minho.

La mujer se detuvo. “Minho, hay un rumor de que la misma reina va asistir esta noche. ¿Estás dispuesto a avergonzar la cara de la familia en frente de ella?”

El cuerpo de Taemin se tensó y se prendió del brazo de Minho, como si estuviera rogando por protección.

Jonghyun había observado como el rostro de Taemin estaba cada vez más pálido. Era obvio que Sulli lo estaba intimidando.

Minho observó el rostro de Taemin, sus ojos mostraron preocupación.

Taemin lo volvió a ver, sus ojos mostraban preocupación.

Minho sonrió gentilmente y apretó suavemente la mano de Taemin para confortarlo.

 “Tal vez fuimos demasiado optimistas en esta ocasión,” dijo.

“Habrán muchas más oportunidades.” Entonces volteó a ver a su amigo y le dijo, “Jonghyun, cuida de May.”

Habiendo confiado Taemin a Jonghyun, Minho decidió acompañar a Sulli.

Taemin se quedó estupefacto ante lo que acaba de ocurrir.

Todo el esfuerzo que había invertido en prepararse para el día de hoy había servido de nada.

“¿Quién era esa mujer?” Taemin le preguntó a Jonghyun después de un largo rato de la partida de Minho. No pudo restringir el tono demandante de su voz.

“Lady Sulli, la prima de Minho y una candidata para convertirse en su prometida,” fue su explicación.

“¿Su prima?” Taemin repitió.
Un pensamiento se dio en su cabeza.

 Los dos compartían cierta aura más allá de la cabellera y rostros perfectos.

“Él dice que no quiere casarse con ella. ¿Quién se cree que es?”
Después de una pausa, murmuró, “Sin embargo, es hermosa, ¿verdad?”

Ella había sido incomparable, aún estando parada al lado de Minho.

Efectivamente, harían una gran pareja.

“Hay bastantes cosas pasando detrás de vestidores,” dijo Jonghyun.

“Esa mujer que viste, se deshizo de su primer esposo. Bueno va a tomar bastante tiempo explicártelo, ¿por qué no vamos a la fiesta nosotros también?”

“¿Sin Minho?” la voz de Taemin mostraba un tono un tanto deprimido.

Minho era Minho. Se había ido con su prima en el momento en el que ella lo había llamado.

En parte también era la culpa de Taemin por haberse paralizado cuando escuchó que la reina iba asistir, sin embargo todo lo que él había deseado era que Minho le dijera que todo iba a salir bien, en vez de ser abandonado…

“Si tan solo me hubiera dicho ‘Estarás bien’…”

Recordando como Minho y Sulli habían partido del brazo hizo que Taemin se sintiera irritado.

Con honestidad sentía que la persona que debía estar junto a Minho era él mismo.

“Pero él no me necesita.”

De alguna manera, este pensamiento hacía doler el corazón de Taemin.

“Los encontraremos cuando lleguemos ahí,” dijo Jonghyun.

“Además escuchaste que supuestamente la reina va a asistir. ¡No puedes permitir que esta oportunidad se escape!” dijo Jonghyun mientras trataba de animar a Taemin.

1 comentario:

  1. hhh en verdad me parecio super mala onda que Minho haya dejado a Tae asi de rapido... no penso que podria lastimar a Tae... U_U

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